5 ejercicios de desarrollo personal para probar con tu hijo

5 ejercicios de desarrollo personal para probar con tu hijo

¿Te gustaría probar nuevos métodos para enseñar a tu hijo la resiliencia, darle confianza en sí mismo y acompañarlo en la búsqueda de sus sueños? Quizás aún no lo hayas considerado: sin embargo, el desarrollo personal podría ser la clave para lograr todo esto.

Lejos de estar reservadas solo para adultos, algunas prácticas de desarrollo personal son igualmente beneficiosas para los niños. Y aquí tienes 5 que puedes integrar desde ahora en tu rutina diaria, cuyos beneficios están más que comprobados.

5 ejercicios de desarrollo personal para probar desde ahora con tu hijo

Trabajar con afirmaciones positivas

"Soy capaz", "Voy a hacer todo lo que pueda para lograrlo", "Hago lo mejor que puedo y estoy orgulloso/a de mis progresos": todas estas pequeñas frases construyen desde hoy la confianza del mañana de tu hijo. Nos ayudan a enfrentar un día lleno de desafíos y a recordar que cada obstáculo es superable.

Para integrar este ejercicio de desarrollo personal en tu vida y en la de tu hijo, elige cada día o cada semana un mantra. Este puede ser corto, muy detallado, o ser una simple palabra que resuma el estado de ánimo positivo en el que quieres sentirte. ¡Los efectos están garantizados!

¿Y por qué no regalarle a tu hijo desde ahora un presente que se convierta en una parte integral de su rutina nocturna? Puedes regalarle tarjetas de Súper-Afirmaciones para ayudarle a superar sus dudas relacionadas consigo mismo o en  el cole y a ganar confianza en sí mismo.

 

Practicar una rutina de gratitud

La gratitud puede integrarse en la rutina de los niños desde una edad temprana. La gratitud es una práctica que busca reconocer lo afortunados que somos por lo que tenemos en nuestra vida. Puede tratarse de elementos tan simples como que hoy haga buen tiempo o que hayamos podido usar nuestra camiseta favorita.

La gratitud se integra perfectamente en una lógica de desarrollo personal, ya que establece conexiones neuronales muy importantes en el desarrollo del niño. Estas conexiones favorecen la plasticidad neuronal, es decir, la capacidad del cerebro para recuperarse y adaptarse. Así, practicar la gratitud fomenta la resiliencia, que es una cualidad esencial para crecer y ganar confianza en uno mismo.

Contrarrestar lo negativo con lo positivo

Este método de desarrollo personal enseñará a tu hijo a reemplazar sus creencias limitantes y pensamientos negativos por caminos de pensamiento más optimistas. Y gracias a la práctica de la gratitud que acabas de integrar, ¡será aún más fácil implementarlo con tu hijo! Para ello, deberás prestar una atención especial a sus palabras e identificar bien su intención de lenguaje:

  • ¿Tu hijo habla de sí mismo de manera despectiva?
  • ¿Tiende a ver primero lo negativo en una situación dada?
  • ¿Es naturalmente ansioso, temeroso del futuro o de las consecuencias de ciertas acciones?

Si este es el caso, entonces adopta desde ahora el reflejo "1 negativo = 1 positivo". Así, por cada palabra negativa que tu hijo pueda pronunciar (sobre sí mismo o de manera general), anímale a reformular para resaltar los aspectos positivos de una situación dada.

Por ejemplo, si tu hijo dice que es malo en la escuela porque ha fallado en un examen, anímalo a encontrar aspectos escolares en los que tiene habilidades. Esto puede ser tan simple como la puntualidad, el esfuerzo en sus deberes o levantar la mano en clase. Con el tiempo, gracias a este hábito, ayudarás a tu hijo a reprogramar su cerebro y a ver el vaso medio lleno, lo que contribuirá a desarrollar su mentalidad de crecimiento: el "growth mindset".

Lectura recomendada:  Fomentar la autoestima en los niños: Por qué es crucial para su desarrollo

Llevar un diario

Poner las emociones en papel es particularmente beneficioso. Esta práctica permite exteriorizar el exceso de emociones o energía del día, y reflexionar sobre lo que se siente. Además, también es una buena manera de dar tiempo al cerebro para asimilar ciertos eventos, y de comprenderlos mejor.

Está comprobado: la escritura, o la práctica del journaling en inglés, ayuda a reducir los síntomas de ansiedad y depresión, y a fortalecer la confianza en uno mismo.

El consejo de Pimagix: para adaptar esta práctica a los más pequeños que aún no saben escribir, puedes comprar pegatinas de estados de ánimo y emociones. Cada día, tu hijo podrá llenar una página de su diario con las pegatinas que mejor representen su jornada. Además de ayudarle a sintetizar lo que siente, es un buen ejercicio para aprender a nombrar las emociones que experimenta

Practicar la visualización

¡La visualización no es solo para los adultos! Puedes proponer este ejercicio a los más jóvenes, explicándoles bien cómo proceder y qué beneficios puede aportarles. La visualización es un ejercicio poderoso que consiste en proyectarse en una situación que nos hace sentir bien y nos inspira, con la esperanza de que algún día se haga realidad.

Esto ofrece a los niños, al igual que a los adultos, la posibilidad de proyectarse en una realidad que aún no es la suya, pero que se vuelve mucho más concreta y factible. Además, la visualización es un verdadero impulso de motivación: una vez que tu hijo logre visualizarse siendo hábil en el skateboard, tendrá muchas menos dificultades para entrenar y alcanzar el nivel que desea.

El consejo de Pimagix: los niños tienen una memoria visual o auditiva más desarrollada que la nuestra. Piensa en adaptar el ejercicio de visualización grabando a tu hijo, o creando un tablero con imágenes que encuentre inspiradoras y que correspondan a los sueños que desea realizar.

 

El desarrollo personal no es solo asunto de adultos. Introducido lo suficientemente temprano en la infancia, se convierte en una verdadera herramienta multifuncional para ayudar a los niños de hoy a convertirse en personas seguras de sí mismas mañana, ¡que no retrocederán ante nada!
¿Qué ejercicio probarás primero con tu hijo?

 

 

Regresar al blog